La vitamina D3 ayuda al cuerpo a absorber el calcio y el fósforo. Se forma naturalmente en la piel cuando se expone a la luz solar y también se encuentra en alimentos como pescado graso y productos lácteos fortificados. Además de su papel en la salud ósea, la vitamina D3 también es importante para el sistema inmunológico y la salud general. La deficiencia de vitamina D3 puede aumentar el riesgo de enfermedades óseas y otros problemas de salud.